¿Qué es Growth Hacking?

¿Y cómo implementarlo en tu negocio?

Hacer crecer un negocio invirtiendo lo mínimo en recursos es el sueño de cualquier empresario. Te enseñamos cómo funciona el Growth Hacking.

Cada día, las empresas buscan la manera de hacer crecer su negocio en un mercado muy competitivo invirtiendo la menor cantidad de recursos posibles, por lo cual han optado por el Growth Hacking, una técnica que se encarga de redefinir los productos y su distribución para que lleguen al mayor número de personas posible.

El Growth Hacking es una técnica, y quienes la dominan buscan analizar un producto para redefinir sus características, dando como resultado un crecimiento y distribución a diferentes canales a cambio de poco presupuesto.

Las empresas surgen a un ritmo imparable, por lo cual optar por un perfil más profesional es necesario. Las pequeñas empresas carecen de recursos para realizar costosas campañas de marketing, por lo que necesitan expertos que los ayuden a desarrollar estrategias sin tener que ofrecer un enorme presupuesto.

¿Qué es Growth Hacking?

A simple vista, el término puede dar una pista de por dónde van los tiros al analizarlo con detenimiento, ya que es la combinación de Growth (crecimiento), y Hacking (hackear, que podría describirse como la habilidad de generar soluciones creativas).

Si buscamos darle un significado más directo, el Growth Hacking es una disciplina que busca, con el mínimo gasto y esfuerzo posibles, incrementar de forma rápida y notoria el volumen de usuarios e ingresos de la empresa.

La idea que plantea el Growth Hacking es simple, crecer con base a las decisiones e ideas, y para ello es necesario redefinir los productos y su distribución para que lleguen al máximo número de personas posible.

El objetivo es conseguir más con menos, pues a nadie le gusta invertir mucho dinero en algo que no sabe si funcionará. Cada acción conlleva riesgos, especialmente en la publicidad.

Ingredientes para el Growth Hacking perfecto

Los especialistas que se dedican al Growth Hacking tienen diversas peculiaridades que los diferencian del resto, en especial porque son muy analíticos, pues la base por la cual se rigen es el crecimiento, y suele ser a partir de esa idea que comienza su trabajo.

Analizar todas las actividades que se están llevando en la empresa es solo el comienzo, por lo que se tendría que también calcular el valor de cada una de ellas para saber con exactitud la cantidad de usuarios con los cuales se dispone.

Dicho de otro modo, el estudio que se realizará estará pensado en analizar las acciones que pueden funcionar mejor que otras. Pensar en cómo potenciar las ya existentes, y exprimir al máximo los diversos canales de comunicación.

En definitiva. El Growth Hacking siempre busca nuevas técnicas para conseguir mejores resultados, y quien se encargue de ello debe ser una persona analítica, multifuncional, ágil y creativa.

Ventajas del Growth Hacking

Como cualquier estrategia de marketing, el Growth Hacking también cuenta con una serie de ventajas que la hacen destacar. Por ello resulta prudente conocerlas antes de desarrollar algún plan de marketing que implemente esta técnica:

    • La principal ventaja que ofrece el Growth Hacking es el bajo presupuesto que requiere para llevar a cabo diversas acciones.
    • En muchas estrategias de marketing el riesgo siempre está presente, pero en el Growth Hacking éste disminuye, ya que las acciones se llevarán a cabo para comprobar su efectividad a un precio reducido. Si son viables, se invierte en ellas, así de simple.
    • Las acciones se analizan y miden constantemente, lo cual permite introducir diversos cambios en tiempo real y la estrategia no funciona como debería.
    • Al hacerse un seguimiento de la estrategia, se podrá tener un mayor conocimiento del mercado, y la información recopilada permitirá realizar mejores acciones.

¿Cómo hacer un plan de Growth Hacking?

Antes establecimos las bases por las cuales el Growth Hacking existe, por lo que sería conveniente detallar los pasos para llevar a cabo un plan de marketing basado en esta técnica.

Cabe resaltar que cualquier empresa puede llevar a cabo una estrategia basada en el Growth Hacking, pues la idea siempre será la de impulsar al negocio invirtiendo la menor cantidad de recursos posible:

1. Creación del producto

La base por la cual se rige el Growth Hacking es simple: vender un producto o servicio de forma creativa y económica. Para que la idea funcione es preciso contar un producto que valga la pena.

Es importante que el resultado final sea de lo mejor, tan bueno que incluso la gente quiera consumirlo. Es necesario plantearse si el artículo que pensaste está listo o es un buen candidato para sumergirse en el mundo del marketing; y si dispones de uno, se puede analizar y mejorar de cara al consumidor.

2. Análisis del mercado

Cuando el producto está listo, toca hacer un análisis de datos, los cuales han de tener como foco principal al consumidor.

Los datos ayudarán a definir el comportamiento de los potenciales compradores, lo cual permitirá trazar gran parte del camino que van a recorrer, aunque para ello es también importante ser creativo.

3. Definir objetivos

El objetivo del Growth Hacking es crecer, pero… ¿cómo se hace? Es necesario establecer metas dentro del proceso de crecimiento que guiarán el camino y dividirán el trabajo en objetivos más pequeños.

Está comprobado que, cuando las metas son más pequeñas, tienen más probabilidades de superarse; y si englobas todas las tareas en una sola, seguramente no avances.

4. Creatividad

Uno de los ingredientes para el Growth Hacking es la creatividad, pues permite buscar soluciones fuera de lo común. La creatividad juega un papel clave en toda estrategia de marketing, por lo cual es vital tenerla siempre presente.

Las estrategias de marketing tradicionales probablemente costarían mucho dinero, pero con un plan basado en el Growth Hacking, existirán más posibilidades con un coste menor, aunque claro, todo estará ligado a las diferentes ideas que se presenten.

5. Adaptación

Para que el Growth Hacking funcione, es importante adaptarse a nuevas formas de trabajo y al mundo digital que está en constante evolución.

La creatividad estará presente en todo el camino, así como también la filosofía por la cual el Growth Hacking se guía, es decir, ahorrar tiempo y dinero.

Growth Hacking como estrategia de marketing

El Growth Hacking es una tendencia que engloba diversos procesos, programación, y un gran número de estrategias que se comenzó a adaptar en pequeñas empresas con el fin de maximizar su crecimiento.

Las estrategias que se desarrollan están enfocadas en el cliente, y muchas pueden inclusive ser pequeñas acciones que pueden tener un gran impacto en el crecimiento.

El Growth Hacking va más allá de los límites del marketing tradicional, dándole la vuelta a las estrategias para conseguir un crecimiento de usuarios exponencial.

Acerca del autor: Este artículo fue escrito por Alexandra Betancourt.

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