Uno de las claves para que Colombia se convierta en el Silicon Valley de América Latina es que el presidente Iván Duque le haya brindado su pleno apoyo a la Ley de Emprendimiento, la cual fue aprobada en diciembre de 2020 para brindar certezas y definir una hoja de ruta para incentivar el emprendimiento en el país.
La norma, que hace parte del Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022 y es una de las primeras de este tipo en América Latina, tiene cinco ejes fundamentales que propiciarán la creación, consolidación y sostenibilidad de las micro, pequeñas y medianas empresas con el objetivo de aumentar el bienestar social y generar equidad. ¿De qué manera?: facilitando los procesos para quienes quieran crear empresa, como, por ejemplo, otorgando tarifas diferenciadas para las pequeñas empresas.
Para el Ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, una de las apuestas de este gobierno es, en efecto, impactar el ecosistema de emprendimiento e innovación.
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Asegura que “para esto, se trabajando en tres ejes clave: capital humano, oportunidades de negocios y factores que promueven la creación y crecimiento de las empresas”.
Por su parte, el presidente de iNNpulsa Colombia, Ignacio Gaitán considera que una verdadera Nación Emprendedora es aquella que impulsa la transformación de su ecosistema emprendedor. “Esto se logra a través de regulaciones pensadas para favorecer el nacimiento, crecimiento y consolidación de emprendimientos, incentivando así el desarrollo productivo, económico y social del país; por eso nos comprometimos desde el primer día a llevar adelante esta Ley de Emprendimiento que ahora entra en su fase de aplicación y ejecución”, señaló Gaitán.
Otro de los puntos importantes de esta Ley de Emprendimiento establece la creación de un mecanismo exploratorio de regulación de modelos de negocios innovadores como las areneras o ‘sandbox’, espacios de creación e innovación controlados para nuevas iniciativas que quieren dar a luz en el mercado colombiano.
En el ámbito del financiamiento, “la norma facilita la consecución de recursos e incentiva mejores condiciones para el acceso al mercado de compras públicas y priorizar esas empresas”. De igual manera, Gaitán señala que “hay un nuevo piso jurídico, fortalecido, moderno y disruptivo para acompañar a los emprendedores y empresarios del país, una herramienta para seguir impulsando los empleos de calidad, la innovación y el desarrollo”.
Incremento en inversión y articulación
No solo se ha avanzado en temas regulatorios en Colombia. En términos de financiación, desde iNNpulsa se busca activar la industria de la financiación para emprendimientos de alto impacto y empresas innovadoras a través del desarrollo y articulación de un portafolio de financiación y el desarrollo de una cultura financiera emprendedora.
En los últimos dos años, esta entidad ha movilizado $1,02 billones de pesos a través de un portafolio de programas e iniciativas que incluye, Líneas de Créditos, Garantías Financieras, Redes de Ángeles inversionistas, Vehículos fiduciarios, el fondo de fondos de capital emprendedor y financiación colaborativa con iniciativas novedosas como a2censo, la primera plataforma de crowfunding de deuda en el país, desarrollada conjuntamente con la Bolsa Valores Colombia a través de la cual, cualquier colombiano puede invertir recursos en empresas con alto potencial de crecimiento, desde $200,000 pesos.
A través de este mecanismo ya se han financiado más de 45 empresas y se han movilizado $10.000 millones de pesos.
De igual manera, desde el Gobierno Nacional y de la mano de iNNpulsa estableció la iniciativa CEmprende, una visión país que se enfoca en facilitar y articular la oferta colaborativa del ecosistema de apoyo público y privado. Actualmente, esta red de aliados asciende a más de 200 entidades regionales, nacionales e internacionales representados por la academia, las Cámaras de Comercio, la empresa privada y el sector público con los emprendedores del país.
Adicionalmente, en lo que va de 2021, CEmprende logró consolidar una red que a la fecha suma 14 sedes físicas en las ciudades de Bogotá, Barranquilla, Bucaramanga, Pereira, Cali, Montería, Manizales, Medellín y Cartagena; estos espacios sirven como epicentros de los ecosistemas de emprendimiento e innovación en las regiones. La meta es finalizar el año con 28 sedes activas en las diferentes regiones del país.
La capacitación es otro de los pilares que tiene iNNpulsa y, en general, el Estado para avanzar en el fortalecimiento del ecosistema. Por ejemplo, en 2020 se logró impactar a más de 43.000 ciudadanos en todos los departamentos del país a través de festivales y espacios de mentalidad y cultura, generación de habilidades blandas y gestión empresarial. Esto significa que, en un solo año, se duplicó el alcance e impacto realizado en los 4 años anteriores.
Igualmente, se ha incrementado de manera importante el número de emprendimientos acelerados. De 800 en 4 años, se pasó a más de 1.400, tan solo en los últimos dos años y, por primera vez, se trabajó en alianza con 500 Startups para el fortalecimiento de capacidades de 30 aceleradoras y programas de aceleración del país.
El escalamiento y la innovación también hacen parte de la construcción de la Nación Emprendedora. Por primera vez se creó un programa enfocado en escalar empresas. A la fecha 109 empresas vienen trabajando sobre 287 proyectos de intraemprendimiento corporativo en sectores como: economía naranja, TIC, salud y sostenibilidad y medioambiente.
Estas son solo algunas de las iniciativas que vienen de iNNpulsa para fortalecer e impulsar el escenario de la reactivación en el país, pues se calcula que el 22 % de los emprendedores en Colombia espera generar seis o más empleos en un periodo de 5 años.
Fuente: ¿Cómo se convertirá Colombia en el Silicon Valley de América Latina?